jueves, 18 de junio de 2009

Conflictos (escrito martes 3 marzo 2009)

martes 3 de marzo de 2009

He tenido bronca con mi compañera de trabajo. Y el caso es que lo sucedido ha pasado a un segundo plano en importancia, cuando he visto como se ha puesto, como iba a por mí. Se ha puesto tan agresiva, y he visto tanta inquina en ella contra mí, que me he quedado hecha polvo, no por la bronca en sí, sino porque he visto el odio en sus ojos, y como no hay reciprocidad en mí respecto a lo que yo siento por ella, me ha sorprendido mucho, no sé como he podido propiciar semejante reacción, aunque ella no se lo crea, yo la aprecio mucho, hemos tenido nuestros roces, normal, después de llevar 30 años sola al frente del negocio, llega "la niña" (me ha visto crecer) y hay que hacerle sitio, pero he debido dar una impresión demasiado alejada de lo que soy, y eso me asusta, porque me llueven las tortas, y además hace que me pregunte ¿que me estoy haciendo a mi misma?, ¿porqué consigo que la gente me odie?, al principio me quieren y aprecian mucho, pero con el tiempo se decepcionan porque... no cuento con ellos, creo que es algo de eso. A mi la gente no me decepciona porque no espero nada de nadie, me siento a gusto sola, conmigo misma, socialmente soy un desastre ...
Es el tipo de reacción en la gente que me deja fuera de control, yo puedo enfadarme, soltar tacos, pero no recuerdo haber odiado a nadie, guardarle tanto rencor a alguien como para rezumar hiel... cuando me calmo tras una bronca soy lo bastante sensata, a pesar de mis defectos, para dejar sitio a la duda, duda sobre quién tenía razón, duda sobre mis percepciones, o los sentimientos reales que me ha llevado a ese conflicto, pero no soy tan necia de reducir la culpa a la persona con la que me he enfrentado, solo sé, con certeza, que ella no puede ser la responsable de lo que siento, de lo demás solo sé que no sé nada.
¿Egoista emocional?, leyendo un test tonto de revista, mientras pensaba como puñetas hago siempre para meterme en conflictos con los demás siendo como soy tan individualista, he pensado que quizás sea ese precisamente el problema... no se muy bién que quiere decir lo de egoista emocional, o si es bueno o malo, (malo, según la revista, porque eso implica por lo visto ser poco "inteligente emocional"), pero ¿como ser generoso con tus emociones cuando las emociones, los sentimientos, estan intimamente ligados al alma?, no se ponerme a salvo, si cae mi ánimo, caigo yo, así que me protejo.
Cuando me siento mal, cuando me hacen daño, quiero morirme, y es tan facil que alguien te odie... solo tienes que existir, porque hay mil y un motivos, mil y una razones por las que lo mereces, tantas como formas de sentir, tantas como personas.
Me da pereza pelear, defenderme... son demasiados los puntos de vista, son demasiadas las personalidades implicadas en una disputa, cada una con sus motivaciones, sus prejuicios, sus interpretaciones... no se me escapa que son demasiadas variables para poder englobarlas todas con exito y resolver la cuestión. Al final todo se resume, no a la verdad "única", sino a la capacidad de conectar con las verdades parciales de cada persona, que son diferentes y genuinas, la capacidad de hacer que crean que estás de su parte, que piensas como ellos.
La apariencia es mas importante que la autenticidad. O dicho de otro modo, la autenticidad no vale nada si no sabes aparentar. Estoy aprendiendo a base de palos, (he tardado ¿eh?, me ha costado lo mio, 36 años nada menos), una realidad que ya engloba hace decadas un refrán popular: "no solo hay que serlo sino parecerlo".
No hago nada con mala intención, si hago daño es sin querer, no tengo intención de perjudicar a nadie, pero se ve (la experiencia me lo dice) que lo hago muchas veces, y se me escapa el proceso...
Tal vez sea ese el problema, la distancia emocional que tomo respecto a la gente, el aislamiento que me procuro, atrae precisamente lo que quiero evitar: los conflictos, y que me dañen.
Pienso que aislándome me protejo, protejo a los demás de mi, de mis inseguridades, de mi falta de autoestima, porque conozco algo mi universo, y soy consciente de todo lo que no puedo controlar, sé que hoy pienso algo y mañana puedo cambiar de idea, sé que puedo odiar hoy y mañana puedo querer, sé que aunque hoy esté de buen humor, mañana estaré de malas, sé que de un dia a otro puedo dejar de percibir a "los enemigos" como tales, y ver a los amigos como enemigos.
Pienso que no dejándome ver, que no acercándome mucho a nadie evito definirme, evito posicionarme, evito comprometerme, para así evitar pertenecer a una persona, a un grupo, a una mentalidad... para así estar libre a la hora de pensar. Pero ocurre que la gente se ofende, porque creen que te crees superior, cuando es precisamente la falta de seguridad en ti misma lo que provoca tu actitud, eso si, acompañada de un gran sentido de la dignidad personal, (¿se interpreta como soberbia?), no voy a comulgar con ruedas de molino, si algo no me parece correcto, no lo admitiré aunque perjudique a "mi grupo", por eso no quiero pertenecer a ninguno.
Infravaloro las apariencias, no soy... no somos, conscientes de hasta que punto afectan nuestras acciones a los demás, olvido que el posicionamiento es obligado en una sociedad, estoy aprendiendo a base de palos, que "la inteligencia emocional" pasa por decir lo que la gente necesita oir. Más que ser auténtico, hay que parecerlo, nadie es adivino, al contrario, somos muy mal pensados, y siempre pensamos lo peor: "no me quiere", "se cree superior", "quiere quedar por encima de mi". Infravaloro las apariencias, porque he dado siempre por sentada una premisa equivocada... que la gente se conoce, que es sincera consigo misma y que tiene la seguridad de la que yo carezco.Fuí tan idiota de pensar que solo yo era la limitada, la debil, la que dudaba de mi. Creí que a los demás no les pasaba, y que por eso, no necesitaban de mi. No creí tener que tener cuidado, nunca he pensado que nadie necesitara mi aprobación o mi cortesía.
La mayoría de las veces las personas hacemos las cosas en el convencimiento de que son por la razón que nos hemos contado a nosotros mismos, y no nos conocemos lo suficiente, o no somos lo suficientemente sinceros para admitir la verdad del porqué de fondo de nuestras acciones. Pero me da la impresión de que solo yo, me doy cuenta de eso, porque me siento demasiadas veces como en una torre de babel, donde la gente no habla mi idioma.
Estoy abocada al fracaso, no se venderme, no quiero venderme, por alguna razón me encierro en mi misma, me basto a mi misma. pero que me baste a mi misma, no significa que no quiera querer y que me quieran, tan solo es la forma de protegerme, he vivido tantos malentendidos, y me expuesto tanto en cada uno de ellos.... lo he puesto todo, sin escudos, abierta el alma, tal cual, no había dobleces en mis acciones, no había estrategia, cuando la persona de turno ha peleado contra mí, si ha empleado malas artes ha pisoteado mi alma, porque la expuse creyendo que no tenía de que protegerme, que el objetivo era la búsqueda de la verdad, y ella no podía dañarme, pero no era así, olvidé, no sabía, que no a todo el mundo le importa la verdad, solo vencer.
Espero aprender algo del dia de hoy, aunque no sé como resolverlo, no sé como debo ahora comportarme con esta compañera, entiendo mi parte de culpa que radica en el hecho de no confiar en mi misma, mis complejos nos han llevado a "competir" en ciertos aspectos, yo esperaba que ella me valorara, sin darme cuenta de que, la que necesitaba valoración era ella, que está aún mas perdida que yo :(
Este suceso me ha dejado con la lágrima facil, y con una sensación acuciante de que necesito hacer algún cambio en mi vida, estoy en el proceso de averiguar cual... aunque me temo que pasa por un cambio de piel, como la serpiente, necesito dehacerme de mi piel antigua y revestirme con otra, porque he cambiado y ya no me ajusta la antigua. Muchos años de dureza interior, la antigua piel, me iba bién: agresiva, firme, rebelde, testaruda, pero ahora siento diferente, ya no me asusta tanto lo que veo, me he vuelto más abierta, he perdido esa dureza que antes tenía, he hecho sitio a la esperanza... de forma catelosa y muy debil, pero ahora mi necesidad de esa clase de alimento espiritual, ha hecho que abra puertas que antes tenía cerradas, que deje sitio a una parte de mí que tenía reprimida, la parte sentimental, la parte espiritual, en la que me enseñaron a no creer, la parte de mi de la cual me enseñaron a avergonzarme.
Y esa mentalidad abierta al mundo sensible, esa concesión que me he hecho a mi misma, hace que ahora, necesite paz exterior y no guerra, creo que en el fondo y sin darme cuenta siempre he buscado guerra, me movía mejor en la guerra, me sentía fuerte teniendo un frente por el que luchar, en mi caso usé la causa animal, pero cuando los "mios", "mi grupo" se volvió contra mi (esa es otra historia), me hicieron un favor, porque me obligaron a ver que no había malos y buenos, que solo existían dolores y limitaciones en ambos "bandos", que entre "los buenos" existía el mismo tipo de miseria de la que pretendía defenderme, de la que pretendía huir, con la que me había propuesto terminar...
Mi enemigo real estaba en el interior de cada persona, en mi interior... me obligaron a romper con ellos y me hicieron un favor, sin yo saberlo.
Necesito ese cambio de piel, necesito tener el valor de dejar de aparentar dureza para mostrarme como podría llegar a ser... si no tuviera miedo a que me destruyesen.

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